Thursday, November 10, 2005

PESIMISMO

Siempre he creido que el pesimismo ha sido ajeno a mí. Pero es ahora a mi madurez (física y emocional) es que me he dado cuenta de que era un monstruo dormido que emerge implacable, silencioso y fulminante. Durante todo el transcurso de mi vida lo combatí, lo critiqué, lo insulté y a aquellas personas que les veía yo un pequeño esbozo de pesimismo las consideraba yo no sólo tontas sino hasta inferiores. Esas ideas que aún me tocó escuchar de las sociedades unidas por un bien común que derivaron invariablemente en regímenes totalitarios en donde al considerárse primero el bien de todos antes del bienestar individual de las personas basados en pensamientos concebidos en Alemania en 1848 en donde lo predominante siempre fue el pesimismo de hacia dónde se dirigían nuestras sociedades, en la crítica permanente, en la denostación, en decir invariablemente que todo estaba equivocado, todo mal... siempre. A la juventud mi expresión siempre fue impulso, de que las cosas a partir de este momento serían mejores, que el mañana será siempre mejor que el pasado. El ayer es un recuerdo pero el mañana está a tu alcance. Que tu libertad individual es lo que debe prevalecer sobre todas las cosas. Que tendremos mejores gobiernos. Que no tendremos a un imbécil como presidente de la nación más influyente del mundo... (ni Fox es tan tonto y tan mezquino como Bush).
Pero el discurso se acaba, es en estos momentos difíciles que se vivien en los que cuesta trabajo decir lo mismo que se decía hace algunos años, en mirar para adelante. Se vive al día con la angustia del futuro. Los estados de ánimo son variables, y lo único constante es la permanente preocupación por lo que vendrá.
Ya no soy el de antes, y en este momento no puedo serlo...

3 comments:

YO said...

Si es muy dificil, algunas veces queremos hacernos enjuages como el que yo me hice algun par de dias nemi ultimo blog, si bien no fue para animarme si no mas que todo por que me pongo a pensar en que h...va seguir asi, hasta el final de mis dias, o incluso el final de mis dias productivos..mejor ocupate en lugar de preocupate asi me digo todos los dias, solo quie cuesta trabajo no pensar alarmante en el futuro.

Frank said...

Lo más difícil es ser coherente con uno mismo, para hablar somos muy buenos, para cumplir lo que decimos somos muy desidiosos

Vane said...

Yo quiero pensar que simplemente ahora ya no vemos la vida color de rosa, que hemos aprendido y que estamos conscientes de lo que hay a nuestro alrededor. Qué pasa a los 30 o después no estoy segura, pero ya cuando te estás acercando a ellos o cuando los traspasas, ves el mundo diferente, nos enseñan a que el éxito es lo material, a que si no vas aquí o allá no vales.
Aprendemos a tener miedo y como adema´s dejamos de sentirnos invencibles y comenzamos a realmente a amar a otras personas, como tus hijos o tu pareja, con ese estupido miedo de si volverás a verlos, sabiendo que sí, pero preocupándote de qué pasará....
Enfrentarnos el mundo actual, a la realidad no es pesimismo, es simplemente abrir los ojos.